Remember, remember the 5th of November…
AVISO: Relato muy personal de la 38ª edición del Memorial Blume y de la edición más reciente de la reunión de Espagatianos (encuentro de gente de la gimnasia española de todos los tiempos).
Domingo, 6 de noviembre de 2016, 18:30.
Acabo de llegar a Pontevedra todavía con el eco del gran día de ayer retumbándome en el cerebro (o quizás sea porque los últimos en terminar la fiesta hace unas horas en la discoteca estábamos justo al lado de un bafle y lo que me retumban aún son los oídos literalmente).
He de confesar que iba a este encuentro de los Espagatianos y al Memorial Blume algo desganada y sintiéndome muy desactualizada del mundo de la gimnasia —sobre todo en lo que se refiere a la gimnasia artística masculina española—, pero me venía bien volver a entrar en círculos gimnásticos, ver a antiguos colegas, quizás hacer algunos nuevos y, de paso, ponerme algo al día y ver gimnasia artística de élite en directo. Y a Seda Tutkhalian. 🙂 :luv:

Por la mañana del sábado, junto con la magnífica anfitriona de la última edición a la que había asistido y que también lo ha sido de esta: Marta Artigas (gimnasta olímpica en Los Ángeles 1984) y un pequeño grupo en el que también estaban Núria Belchi (gimnasta olímpica en Seúl 1988) y Fernando López-Arroyo (entrenador de muchos grandes gimnastas españoles), hicimos algo de turismo y visitamos las obras de la Sagrada Familia y una bodega muy típica en Barcelona. La excursión ayudó a que se me disipase el estado de introspección en el que me hallaba (cosas de la presión atmosférica) y entré en ambiente.


De arriba a abajo y de izquierda a derecha: Edel Costas, Pedro Cantos, Núria Belchi, Rafa Montecristo, Fernando López Arroyo, Mar Higuera, Marta Artigas y yo.
Más tarde, un grupo algo más numeroso acudimos a comer al restaurante de corte gallego (para eso viajo a la otra costa… ) Els Mistos y nos pusimos las botas. Allí coincidí con don Jaime Belenguer, olímpico en Roma 1960, seis veces campeón de España en el concurso general individual y gimnasta de la misma generación que Joaquín Blume.


Entre otras muchas personas interesantes también coincidí con la juez de GAF y de GAM Gema Terrades, que me puntuó en algún Campeonato Gallego y con la que me alegro mucho de haber hablado porque va a ayudarme a difundir el respeto y el amor por el aparato de caballo con arcos. Hablo muy en serio.
Y a continuación, nos dirigimos al pabellón para ver el torneo.

Lo primero que vi nada más llegar al Centre Esportiu Municipal Olímpics Vall D’Hebron fue el triple volteo en suelo del ruso Nikita Nagornyy. Sobrado de altura y clavado. Así, para abrir boca. (Gracias, Javier Collados, por los vídeos).
Luego me centré en las chicas. Hablaré de las españolas. Ana Palacios fue la única de su rotación que no se cayó en asimétricas.
Luego Ana salió algo disgustada de la barra de equilibrio, pero tiene un ejercicio muy bonito que a poco que busque lucharlo en otra ocasión puede darle muchas alegrías. En barra de equilibrio precisamente fue donde destacó Claudia Colom sin fallos graves, con determinación y con una coreografía interesante que le valió la tercera nota más alta de la competición en ese aparato y además resarcirse del fallo que había tenido en asimétricas. Por desgracia, tanto Claudia Colom como Ana Palacios fallaron sus últimas diagonales en el suelo cuando hasta entonces lo estaban haciendo realmente bien.
Ana Palacios, por cierto, sigue utilizando como música de suelo el «Nuvole Bianche» de Ludovico Einaudi y que tanto nos gusta.
Las júnior que participaban fuera de concurso, Marta Sánchez y Violeta Sánchez, en mi opinión hicieron muy buen trabajo. Tuvieron fallos como también tuvieron todas las sénior y quizás no desplegaron toda la dificultad que son capaces de hacer, pero me parece que este torneo para ellas es para adquirir rodaje.
En cuanto Marta Sánchez se subió a la barra/viga de equilibrio me pareció ver sobre ella a Lénika de Simone o a las hermanas Cuesta, que lo hacían muy bien en ese aparato. Por su parte, Violeta Sánchez, también en barra/viga me impresionó luchando un desequilibrio con tanto empeño que lo recuerdo como el momento más apasionante de la competición, y cuando finalmente logró estabilizarse encima de la barra muchas personas se lo reconocimos emocionadas.

El resto de las gimnastas de GAF también cometieron errores como comentaba. La rusa Seda Tutkhalian tuvo los fallos típicos que le hemos visto en otras ocasiones cuando no está especialmente inspirada y se cayó en la salida de asimétricas y en el volteo en plancha con pirueta en barra/viga, pero salvó los muebles en el suelo y en salto, donde buscó arañar décimas respecto a las demás competidoras con un yurchenko con doble pirueta, pero dobló mucho las rodillas en la recepción. La francesa Mélanie Dos Santos, a pesar de una caída en asimétricas, fue mucho más regular y la adelantó en la clasificación general.
La ganadora en GAF fue la que menos errores cometió: la belga Nina Derwael.

De los chicos pude ver, aparte de la buena actuación de Nikita Nagornyy en varios aparatos, los ejercicios de barra fija y de suelo de Rubén López. En barra fija consiguió la nota más alta de la competición en ese aparato y con varias sueltas espectaculares se ganó al público, y cerró su competición consiguiendo la segunda mejor nota del aparato de suelo y otra ovación del público al que le dedicó gestos de agradecimiento.
De primero quedó el ruso Nikita Nagornyy, de segundo el español Rubén López y tercero fue el estadounidense Kanji Oyama.

Pueden verse todos los resultados en la página de The Gymternet.

A la salida del pabellón nos topamos con unos jabalís, por cierto. En mi tierra no es muy recomendable alternar con ellos, pero en Catalunya por lo visto los tienen domesticados (lo de los jabalís es literal, no es una metáfora).
Luego llegó la cena oficial del evento en la que también estábamos los Espagatianos. Me tocó sentarme en la mesa de, entre otras, las entrenadoras María Ollé, Maribel Moncasí y con Blanca Ferret, que fue entrenadora de las gimnastas olímpicas Esther Moya y Laura Martínez.
Al llegar a los postres, me fui de expedición a la mesa de las chicas y conseguí autógrafos para vosotros. 😉


Los chicos españoles, junto con el puertorriqueño José López, estaban en otra mesa con sus amigas especiales y también nos dedicaron unas firmas con cariño.

Pero a Seda Tutkhalian yo no la veía por ninguna parte y nadie sabía decirme dónde podría encontrarla. Preguntando llegué a oír teorías de todo tipo sobre su paradero. Finalmente, Maribel Moncasí se unió a mi cruzada, y gracias a su determinación y los contactos adecuados conseguimos llegar hasta ella. Estaba en la mesa de la delegación rusa con su compañero Nikita Nagornyy, pero pasaba muy desapercibida y parecía estar de incógnito, aunque en cuanto me dirigí a ellos en mi mejor ruso (perdí varios miles de neuronas en el proceso, pero valió la pena) ambos gimnastas fueron muy amables y simpáticos y se sacaron una foto con nosotras.

Seda también me firmó un autógrafo. 🙂

De regreso a «nuestra zona» algunos espagatianos ilustres también me dedicaron unas palabras y yo se lo agradezco mucho.


Después salimos todos a tomar el aire de la noche barcelonesa y poco a poco la gente se fue retirando a sus aposentos.
Algunos de los olímpicos y mundialistas más fiesteros (y yo) nos propusimos agotar la noche y la rematamos bailando como si no hubiese un mañana. Pero afortunadamente la mañana llegó y nos encontró en bastante buena salud teniendo en cuenta las circunstancias. Es lo que tiene haber hecho deporte. 😉
Y luego llegaron las despedidas. :violin: Hasta la próxima…
Muchísimas gracias a la anfitriona: Marta Artigas, a Xavier March, a la Federació Catalana de Gimnàstica y a todos quienes por su mera presencia hicieron de este evento algo inolvidable.

Y hasta aquí mis «memorias del Memorial». Me alegro muchísimo de haber participado una vez más en la reunión de Espagatianos. Y eso que no hicimos, como en alguna otra edición, ni el pino ni el espagat ni ningún elemento del código. Hay que arreglar eso para la siguiente. Espero que me sigan invitando. :smh:
Cristina,
Estupenda crónica. Me ha gustado mucho tu relato…
Nos vemos en la próxima.
Besote…
Estupenda crónica, Cris.
Nos vemos en Madrid 2017.
Un abrazo!
Núria.