«Es perfecta», decía de ella la revista Time en 1976, por ser la primera en obtener un diez en unos Juegos Olímpicos. Pero Nadia Comăneci también era humana, y he encontrado un montaje de vídeo muy bonito que recoge esos momentos.
Quienes me conocen, quizás les parezca que quiero burlarme aquí de desgracias ajenas, pues en este Real Madrid-Barça de la gimnasia yo tomo partido por Olga Korbut. Pero igual que hasta mejores madridistas pueden llegar a reconocer, aceptar y hasta admirar los mejores momentos de su eterno rival (quiero creer que eso ocurre, y también a la inversa, pero yo soy un alma cándida), yo admiro la capacidad de Nadia por luchar hasta en los momentos más duros, y eso es lo que intento demostrar, como esa era la intención de la usuaria de YouTube comaneci1 publicando este vídeo:
Tras Montréal 1976, sobre todo en 1978, la forma física y la fuerza mental de Nadia Comaneci sufrieron bastante a causa del divorcio de sus padres, su propio desarrollo físico al pasar de niña a mujer y las disputas de Béla Károlyi con la federación de gimnasia y el gobierno de Rumanía.
Nadia Comăneci consiguió dieces épicos y algún que otro sonado 0.00, pero por mucho que me empeñe en que Olga Korbut merecía mucho más de lo que le daban, reconozco que Nadia luchaba como nadie.
Yo estoy totalmente de acuerdo con todo lo que dices en esos comentarios, Ossiana.
Más que con Korbut, cuya carrera acabó en el 76 (justo cuando comenzó la de la rumana) se suele contraponer a Nadia con Nellie Kim, ya que tuvieron trayectorias deportivas paralelas y un estilo gimnástico contrastado.
También en este caso me quedo con Nellie (a pesar de las barrabasadas que ahora perpetra en la FIG junto a Bruno Grandi 👿 )
Yo también prefiero mil veces a Korbut. En realidad ella fue la que marcó un antes y un después en la Gimnasia. La dificultad de sus ejercicios de Barra y Asimétricas era enorme. Imprimía a sus ejercicios una expresividad, una chispa, una alegría absolutamente contagiosa que marcan para mi gusto la diferencia respecto a los de Nadia.